-
Agita con ganas: Dale un meneo rápido al frasco, como si estuvieras mezclando un café con leche, para que los ingredientes se unan en una danza perfecta.
-
Aplica con cariño: Exprime una gotita (o dos, si estás de humor goloso) en tus dedos o directamente en la zona que quieras: vagina, clítoris, año o el juguete. Si vas con el Toka, pon un poco en la parte insertable para que la oscilación 360º se sienta como un susurro suave, y otra gotita en el clítoris para que la lengua estimuladora te haga temblar de gusto. Extiéndelo con suavidad, como si estuvieras decorando un pastel con crema.
-
Ajusta la dosis: Empieza con poco; este lubricante es potente y dura lo suyo. Si quieres más, añade otra gotita. Es como echarle azúcar a un café: prueba primero y luego decides cuánto más necesitas.
-
Déjate llevar: Úsalo en sexo vaginal, anal, masturbación o con el Toka. El sabor a tiramisú es una invitación a besar, lamer y jugar sin frenos. Con el Toka, el lubricante hace que cada giro y lametazo sea puro fuego, como si estuvieras saboreando un postre mientras te derrites.
-
Limpieza sin rollos: Después, un poco de agua tibia y jabón suave, y listo. Tanto tú como el Toka quedaréis como nuevos. Asegúrate de limpiar bien la lengua estimuladora del Toka para que esté lista para el próximo festín.